Entre el 28 y 29 de enero Pablo de Felipe realizó una visita a la Iglesia Protestante de Salou. En la tarde del 28 tuvo la oportunidad de hablar al grupo de jóvenes de la iglesia sobre “La ciencia como vocación en el cristianismo. ¿Puede un cristiano dedicarse a la ciencia?” En su presentación combinó su testimonio personal como bioquímico/biólogo molecular, dedicado por dos décadas a diferentes actividades científicas, con ejemplos históricos de científicos cristianos cuyas aportaciones a la ciencia son un ejemplo para los cristianos de hoy día. La presentación estuvo seguida de un animado tiempo de preguntas sobre los más diversos temas, destacando los relativos a los orígenes y la interpretación de ciertos textos bíblicos relacionados.

El domingo 29 Pablo de Felipe presentó un tiempo de escuela dominical de adultos sobre “Diferentes visiones cristianas sobre el Génesis y la creación. ¿Cómo podemos interpretar el Génesis y los textos bíblicos de la creación?” Esta presentación analizó las diferentes visiones que a lo largo de las historia del cristianismo se han dado sobre los orígenes, tanto desde el punto de vista de la interpretación de los textos bíblicos de la creación, como de la información científica que ha estado disponible en cada época, así como diferentes intentos de armonización de toda esa información. Finalmente, Pablo de Felipe expuso con más profundidad una interpretación teológico-contextual de los textos bíblicos que, ni busca enfrentarse a la ciencia, ni tampoco necesita lograr un concordismo con ella. Esta forma de interpretación de los textos bíblicos se basa tanto en el análisis de los propios textos como en la progresiva acumulación de información sobre el contexto del mundo del Antiguo Testamento que la arqueología ha puesto a nuestra disposición desde el siglo XIX.

El audio de la presentación está disponible aquí.

El vídeo de la presentación está disponible aquí y pinchando en la imagen de abajo.

Finalmente Pablo de Felipe se dirigió a la congregación en Salou con una predicación sobre la pregunta “¿Podemos compatibilizar ciencia y cristianismo?” en la que animó a los asistentes a interesarse tanto por la fe cristiana como por la ciencia, rechazando que sean ámbitos en conflicto y rescatando una visión cristiana de la ciencia que hunde sus raíces en la antigüedad cristiana y que ve el conocimiento como un don divino, que nos permite hacer ciencia para la gloria de Dios y el bien de la humanidad, como decían algunos pioneros de la ciencia moderna. Se trata de una visión que no pretende obtener información científica de las páginas de la Biblia, ni tampoco usar ésta para limitar la investigación de los científicos.

Tras el culto dominical, los asistentes disfrutaron de una tradicional comida local: una calçotada.